El Programa de la Quinta Internacional – CAPITULO XVI

CAPITULO XVI

EL PROCESO DE CONSTRUCCION DE LA CIVILIZACION COMUNISTA

El proceso de construcción de la civilización comunista comienza cuando se constituye el Estado Obrero Mundial. Los trabajos anteriores del Estado Obrero Antinacional, son tan solo la preparación social y política de la infraestructura socialista a partir de la cual se forma el Estado Obrero Mundial. En el terreno social el primer cometido sera generalizar la infraestructura socialista del Estado Obrero Antinacional/ a la totalidad del Estado Obrero Mundial.

A partir de la generalización y universalización de la infraestructura socialista del Estado Obrero Antinacional, comenzara la construcción de la civilización comunista.

En este proceso que marca la emancipación de la totalidad de las fuerzas productivas del mundo de la tiranía del particularismo social de la propiedad privada, se expresa el momento en que concluye históricamente la etapa de transición del capitalismo al socialismo.

Supongo que algunos lectores se preguntaran: ¿Por que entonces en esta obra se habla de la caducidad histórica del Programa de Transición?

La respuesta es que el desarrollo de las fuerzas productivas ha desbordado los marcos de la época transicional, de modo que el comunismo es objetivamente posible hoy, no siendo una etapa diferente de la actual. Ello implica que el desarrollo del Programa de Transición, no esta separado del proceso de construcción de la sociedad comunista, sino que el Programa de Transición se realiza conjuntamente con las tareas de construcción de la sociedad comunista.

Todo lo dicho en el párrafo anterior implica que en el Estado Obrero Antinacional, se inicia el proceso de construcción de la sociedad comunista, al mismo tiempo que se crea la infraestructura socialista.

En una palabra no pasamos por encima de las tareas de la época de transición, pero al mismo tiempo no separamos ni oponemos las tareas de la época de transición a las tareas de construcción de la sociedad comunista. De hecho separar dichas tareas, implicarla permitir el desarrollo de la contrarrevolución democrática o pequeño burguesa en el Estado Obrero. Por ello planteamos como alternativa el Estado Obrero Antinacional, el cual cumple las tareas transicionales completándolas y profundizándolas con las tareas supertransicionales. Si el desarrollo de de la lucha de clases hubiera seguido desde la formación de la II Internacional un desarrollo progresivo, el resultado hubiera sido el previsto por Marx y Engels.

Tal posibilidad no hubiera sido irrealizable ni mucho menos, todo lo contrario. Si tras el II Congreso del Partido Socialdemocrata Ruso, Plejanov hubiera permanecido al lado de Lenin, o simplemente si Martov no hubiera entrado en conflicto con Lenin hemos las posiciones planteadas por Lenin hubieran sido aceptadas. De modo que los elementos oportunistas, carentes de un verdadero valedor hubieran quedeado reducidos a la inoperancia. El resultado de ello hubiera sido que al llegar la Revolución Rusa de 1905, la clase obrera rusa habría tenido un partido obrero unificado, que hubiera sido capaz de dar una expresión coherente y politicamente unificada al movimiento revolucionario. Solo hubiera sido necesario que Plejanov no cediera ante los centristas o que Martov asumiera politicamente sus contradicciones centristas. La crisis del Partido Socialdemocrata Ruso abierta por los oportunistas y desarrollada por los centristas bajo la cobertura de los grandes líderes históricos, hizo posible que la revolución cayera bajo la dependencia de líderes ajenos a la socialdemocracia en los primeros momentos. En una palabra Plejanov hizo posible aquello que pretendió evitar al oponerse a Lenin. La victoria de la Revolución Rusa de 1905, hubiera sido posible si desde el primer momento el Partido Socialdemocrata Ruso hubiera aparecido unificado y coherente, aplicando todo aquello que se habia acordado en Iskra y en el II Congreso del Partido Socialdemocrata Obrero Ruso.

La revolución democrática en Rusia, se habría tenido que transformar en permanente, de modo que se habría proyectado sobre Europa entera, barriendo las posiciones de los oportunistas y suprimiendo las tendencias centristas, antes de que hubieran tenido tiempo de cristalizar.

El resultado habria sido la galvanización revolucionaria de todos los partidos socialdemocratas de Europa Occidental, creando las condiciones para el paso a la siguiente etapa histórica, una vez que el capitalismo habia superado su etapa progresiva entrando en una etapa regresiva.

En definitiva el triunfo de la Revolución Rusa de 1905, hubiera

implicado que entre 1914-18, en lugar de la guerra imperialista, habria tenido lugar la guerra civil revolucionaria contra las burguesías europeas.

En estas condiciones el desarrollo de la revolución socialista habria seguido los planteamientos marcados por Marx y Engels, si bien las contradicciones objetivas que hubieran surgido, hubieran de haber sido combatidas y superadas, en función del desarrollo del Estado Obrero Antinacional, como un primer paso hacia el Estado Obrero Mundial, planteando la dictadura del proletariado como un proceso histórico de construcción del Estado Obrero Mundial. Al tiempo que también se habria desarrollado el centralismo ideológico como método organizativo, si bien todo ello con un matiz que seria la carencia de traumas en el proceso de desarrollo del proletariado como clase.

En estas condiciones, muy probablemente, hubiéramos llegado al Estado Obrero Mundial en 1930, habiendo alcanzado la sociedad comunista en 1950. Pues el desarrollo de las fuerzas productivas es directamente proporcional al desarrollo del proletariado como clase.

Algunos lectores dirán que estamos haciendo ucronias, sin embargo las ucronias suelen ser necesarias para comprender los procesos históricos, y no son un mero capricho sino el resultado de un análisis cuidadoso de la realidad social.

En este capitulo el obj etivo central, es dar al lector la perspectiva histórica, de la diferencia entre la construcción de la civilización comunista, en función de un proceso de desarrollo progresivo del proletariado como clase y de un proceso de desarrollo contradictorio y discontinuo.

Las medidas generales de construcción de la sociedad comunista ya han sido esbozadas en capítulos anteriores y a ellos me remito.

En cuanto a los aspectos concretos, ello seria parte integrante de un proyecto de ingeniería social para la construcción de la civilización comunista, que hemos mencionado en el capitulo XV.

Tan solo remarcare que la construcción de la sociedad comunista comienza cuando queda constituido el Estado Obrero Mundial.

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